miércoles, 5 de noviembre de 2014

ISTRUCCIONES A LOS SIRVIENTES

Instrucciones a los sirvientes.
Cuando tu amo o tu señora llamen a un sirviente por su nombre, si ese sirviente no se halla presente, ninguno de vosotros ha de responder, pues entonces vuestras cargas no tendrán fin, y los propios amos reconocen que es suficiente con que cada sirviente acuda cuando es llamado.
Cuando hayas cometido una falta, muéstrate siempre insolente y descarado, y compórtate como si fueras la persona agraviada; eso minará de inmediato la moral de tu amo o señora.
Si ves que otro sirviente causa un mal a tu amo, no dejes de ocultarlo, no vaya a ser que te acusen de chivato. No obstante, existe una excepción en el caso de un sirviente favorito, que es merecidamente odiado por toda la familia, al que la prudencia obliga, por tanto, a atribuir todas las faltas que pueda al favorito.
La cocinera, el mayordomo, el mozo de cuadra, el criado que va al mercado, y todos los demás sirvientes que participan en los gastos de la familia deben actuar como si todo el patrimonio de su amo tuviera que dedicarse al ámbito particular de ese sirviente. Por ejemplo, si la cocinera calcula que el patrimonio de su amo asciende a mil libras al año, llega a la razonable conclusión de que con mil libras al año se puede comprar carne suficiente y que, por tanto, no tiene por qué ahorrar; el mayordomo realiza la misma estimación, y también el mozo de cuadra y el cochero, y así lo gastaréis todo mientras honráis a vuestro amo

“Instrucciones a los sirvientes puede leerse como un documento clave en la larga, cómica y ladina historia de irreverencia irlandesa en que están incluidos Sterne y Sheridan y Wilde, Joyce y Beckett y Flann O’Brien. Esta tradición no se apoya en la originalidad del argumento ni tampoco en la calidad del ingenio, sino en lo lejos que el creador está dispuesto a llegar para neutralizar la monotonía de un libro de instrucciones, por ejemplo, o lo previsible de un día cotidiano, mediante la pura energía de las frases en su estructura dinámica y su tono, la calidad de la observación de las cosas pequeñas, la descarada elección de detalles

Biografía

Jonathan Swift fue educado por su tío Godwin, ya que su padre falleció antes de que él naciera. Durante su niñez, vivió en medio de una gran pobreza. Estudió en el Trinity College de su ciudad natal. Concluidos sus estudios, se trasladó a Leicester para estar junto a su madre, Abigail Erick. Pronto se le presentó la oportunidad de trabajar como secretario del famoso político inglés sir William Temple, escribiendo para él y llevándole sus cuentas, para lo que se trasladó a Moor Park en Surrey, Inglaterra, en 1689. A medida que pasaba el tiempo, crecía la confianza de Sir William en su empleado, por lo que éste llegó a tener conocimiento de asuntos de gran importancia, siendo incluso presentado al rey Guillermo III.
Cuando Swift se mudó a Moor Park, encontró allí a una niña de ocho años, hija de un comerciante llamado Edward Johnson, quien falleció joven. Algunas fuentes aseguran que era en realidad hija ilegítima de Temple.1 Según el propio Swift, la niña, Esther Johnson, nació el 18 de marzo de 1681. Más tarde reaparecería en la vida de Swift con el nombre de Stella.
Hacia 1694, Swift estaba aburrido de su trabajo, y viendo que Temple, quien valoraba sus servicios, no tenía prisa en promocionarle, abandonó Moor Park y volvió a Irlanda para ingresar en la Iglesia.1 Tras su ordenación, obtuvo el prebendado de Kilroot, en las cercanías deBelfast. En mayo de 1696, Temple convenció a Swift de que regresara a Moor Park para ayudarle a preparar sus memorias y sus cartas, con vistas a su publicación. Allí se reencontró con la niña de antaño, convertida en una joven de 15 años. Durante este tiempo, Swift escribió su primera obra, La batalla entre los libros antiguos y los modernos, que, sin embargo, no se publicó hasta 1704.
Swift permaneció con Temple hasta la muerte de éste, en enero de 1699. En el verano de ese año, recibió y aceptó la secretaría y capellanía del conde de Berkeley; mas al llegar a Irlanda se encontró con que la secretaría ya había sido ocupada por otro. De todos modos, se hizo cargo de las iglesias de Laracor, Agher y Rathbeggan y con el prebendado de Dunlavin, en la Catedral de St. Patrick en Dublín. En Laracor, a 4 kilómetros de Trim y 32 de Dublín, Swift predicó ante una congregación de tan sólo 15 personas, lo que le permitió cultivar su jardín y dedicarse a la reconstrucción de la vicaría.
Jonathan Swift

Nacimiento30 de noviembre de 1667
Dublín
Defunción19 de octubre de 1745
(77 años)
NacionalidadIrlandés
OcupaciónEscritor
Lengua de producción literariaInglés
Obras notablesLos viajes de Gulliver
Una modesta proposición

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